Maximiliano Morán, Cientista Político
Jefe de proyecto PAOLA del Instituto Igualdad
La pandemia del coronavirus ha azotado a todos los países del mundo y no hay lugar donde el virus no haya tomado protagonismo en todos los aspectos de la sociedad. A pesar de esto, una vez más vemos como incluso en una pandemia a nivel global los efectos que esta provoca no afectarán a los países de la misma manera y el continente americano rápidamente se empina a ser el epicentro de la pandemia y quizás, la zona mas afectada.
El mal manejo de algunos gobiernos y por consiguiente malos resultados y contagios incontrolables saltan a la vista en nuestra región, pero las medidas de control como el confinamiento social y el cierre de fronteras podrían hacernos perder el foco hacia la solución y alargar aun más la tan ansiada recuperación.
Superando ya los 4 millones de contagios – aproximadamente el 50% de los casos confirmados a nivel global -, América parece estar entrando a la mayor de sus crisis tanto sanitaria como política, económica y social. ¿cómo países como Chile pueden acabar con la pandemia y retomar la normalidad si sus vecinos no logran el mismo resultado? Estados Unidos y el MERCOSUR están dentro de los primeros cinco principales socios comerciales de Chile, hacia Argentina – previo a la pandemia – habían alrededor de 115 vuelos diarios operado por líneas nacionales y extranjeras, con Perú este número superaba los 150. A pesar de ser un país ubicado entre el océano y la cordillera de los andes, la intensa relación tanto comercial como política y social con nuestros vecinos en innegable.
Algunas regiones parecen tener esto claro, en Europa las medidas de rescate y cooperación entre los países no parecen tener mucha objeción, y la frase “de esta salimos todos” se repite cada vez más en los discursos de presidentes y políticos europeos. Sin obviar la clara diferencia de la existencia de la Unión Europea como organismo regional, la respuesta de todos los países no debería ser diferente a la tomada por Europa, planteándose como objetivo una solución conjunta para acabar con el coronavirus. A pesar de esto en Chile – y en América Latina en general – la idea de una respuesta regional tanto para afrontar el avance de la pandemia como para minimizar sus efectos negativos no ha sonado como una opción para los lideres de la región, sin ir más lejos el gobierno del presidente Sebastián Piñera comunicó que cerraría 5 embajadas chilenas, lo que muestra que claramente las relaciones con el exterior no son una prioridad para este gobierno, lo mismo sucede con la administración Trump en Estados Unidos y su corte de relaciones con la OMS.
La llegada de la primera gran pandemia en un mundo hiperconectado no solo ha demostrado una vez más las falencias estructurales y la enorme desigualdad existente en los países, sino que también nos lleva a preguntarnos que sociedad queremos tener después y como vamos a relacionarnos en todos los niveles, ya sea entre personas como también entre Estados. A pesar de la incertidumbre que esto representa una cosa parece ser clara, la frase “de esta salimos todos” hoy tiene mas sentido que nunca y las medidas que se tomen para afrontar las inciertas consecuencias del coronavirus deben estar basadas en un solo gran concepto, cooperación…. cooperación.