En medio de la crisis abierta por la aprobación de cinco mega centrales de Hidroaysén y con la mesa del gas estancada, el Ministro Golborne ha decidido tomar dos semanas de vacaciones en Miami. Todos los conocedores de la zona indican que se está incubando un nuevo momento de alta conflictividad en Magallanes.
Como todos recordaran la Mesa del Gas de Magallanes, se originó tras el paro regional que la comunidad llevó a cabo en enero del presente año. Su objetivo era recopilar antecedentes que permitieran concluir en un anteproyecto de ley que regule la tarificación del gas. Según entendieron todos, después de escuchar a los diversos actores involucrados, ENAP, GASCO, etc., y a la comunidad de Magallanes, el gobierno pondría en conocimiento de la Mesa del Gas un anteproyecto de ley que regulara la tarificación del gas, con los debidos resguardos para que no se produzcan alzas desproporcionadas de precios. Esto vendría a corregir una situación única en Chile en que el servicio de distribución de gas, a pesar de ser lo que técnicamente se conoce como un “monopolio natural”, no estaba regulado por ley.
La Mesa del Gas empezó a funcionar el 1 de marzo del presente año y al 6 de mayo se habían efectuado seis reuniones. La primera fue constitutiva.La segunda reunión escuchó un informe del Gerente de ENAP Magallanes, Roberto Mc Leod, quien se refirió a las reservas de gas, indicando que estas alcanzarían para unos años más si no se hacían las inversiones necesarias.
En las siguientes reuniones expusieron, GASCO distribuidora del gas, Methanex principal consumidor industrial, EDELMAG encargada de la generación y distribución eléctrica en la región, Geopark una de las petroleras privadas que opera en la zona, el sindicato de Enap, el Comité de Defensa de Magallanes (Codema) y el Consejo Regional (CORE).
Con la sexta y última reunión efectuada el 6 de mayo recién pasado, el Ministro Golborne dio por terminada la gestión de la Mesa del Gas e indicó que hasta fines de junio se trabajará en conjunto con los parlamentarios magallánicos en la elaboración del proyecto de ley sobre tarificación del gas en la zona.
Los representantes de la Asamblea Ciudadana abandonaron, esta última reunión, molestos porque, según argumentaron, el gobierno central los engañó, pues del trabajo de esta instancia no surgirá ninguna propuesta concreta tendiente a formular el proyecto de ley de tarificación de esta combustible. Golborne argumentó que es en el Congreso es donde se legisla y no en la mesa de trabajo.
Conclusión, el protocolo de acuerdo que puso fin al paro en Magallanes “tenía letra chica”. No de otra forma se puede entender que en el punto 5 de dicho documento, que puso fin al paro se podía leer lo siguiente:
“5.- Se establecerá, a partir del 1 de marzo de 2011, una mesa técnica consultiva de trabajo conformada por representantes del Gobierno (Ministerio de Energía y otros) y de la comunidad magallánica, con la finalidad de que le haga llegar propuestas o recomendaciones al Gobierno, que tengan por objeto proponer un nuevo sistema de regulación tarifaria del gas para Magallanes. Estas propuestas o recomendaciones se recibirán por el Gobierno en el contexto de su trabajo destinado al envío de un proyecto de ley de tarificación de gas para la zona (“Proyecto”). Desde luego, queda anunciado que el Gobierno dispondrá que el Proyecto contenga disposiciones similares a las existentes para otros servicios públicos, que consideran los costos de provisión de estos servicios y los subsidios o beneficios requeridos para mitigar los efectos en los más necesitados de la población”.
Como lo han hecho ver diversos actores y organizaciones de la zona la Mesa del gas ha sido solo una cobertura para calmar los ánimos, pero no ha existido una voluntad real de dar participación a la sociedad civil magallánica en la construcción de una propuesta. Malas noticias para los magallánicos: el acuerdo venía con “letra chica” y el Ministro se va de vacaciones.