La propuesta del Senador Letelier y de la bancada de senadores socialistas es muy atingente porque permitiría que el subsidio de $40.000 que enviará el Gobierno al Congreso, sea aumentado al doble para las tres Regiones declaradas Zonas de Catástrofe: O´Higgins, El Maule y Bío-Bío. Estas tres regiones representan en conjunto un 23% de la población nacional y el mayor impacto de esta medida en el gasto fiscal sería equivalente a unos 75 millones de dólares.
El actual Ministro de Hacienda Felipe Larraín ha dimensionado que las pérdidas sufridas por el terremoto se sitúan entre 20 mil y 30 mil millones de dólares. Por lo tanto se requiere de un Plan de Reconstrucción que permita generar las condiciones económicas y sociales para que el país vuelva a disponer de la infraestructura que hoy día no dispone.
Por otro lado el Presidente Sebastián Piñera ha anunciado la constitución de un Fondo de Reconstitución, que utilizará cuatro fuentes primarias para su financiamiento:
• Reasignaciones del actual Presupuesto Nacional
• Utilizar una parte de los Fondos Soberanos FEES y FRP, que actualmente los administra el Banco Central.
• Hacer uso de endeudamiento “externo”
• Ampliar los beneficios fiscales de la actual Ley de Donaciones.
Al respecto, algunas reflexiones sobre la manera en que el actual Gobierno ha comenzado a gestionar el país, con un foco en lo financiero más que en lo social y productivo.
En primer lugar, en lo que respecta a la reasignación presupuestaria, debiéramos saber pronto cuales serán los gastos del presupuesto que se pretende recortar, para así entregar una opinión fundada. No vaya a ser que se pretenda resolver un problema, a costa de beneficios y derechos sociales.
En segundo lugar, hacer uso de los Fondos Soberanos y/o hacer uso del endeudamiento externo, tiene un impacto relevante en el nivel del tipo de cambio y con ello en la competitividad del sistema productivo y, en última instancia, en la ocupación de los factores productivos. En este punto, la Comisión Económica del Partido Socialista ha sido clara en señalar que es partidaria de privilegiar el endeudamiento “interno”, con lo cual se evita apreciar el peso y además se abren opciones de renta fija nacionales para las inversiones de las AFP.
En tercer lugar, una reforma a la actual ley de donaciones tiene una incidencia que sería marginal en la constitución del Fondo de Reconstrucción pero que posiblemente complejizaría la discusión parlamentaria, en un tema que abarca muchos otros aspectos. Por lo tanto, es mucho más razonable que para este punto se envíe una Ley aparte al Congreso, para ser tramitada en forma paralela.
En cuarto lugar, no se vislumbran medidas de corto plazo para que las familias de menores ingresos puedan paliar los enormes sufrimientos causados por el terremoto. Al respecto, la propuesta del Senador Letelier y de la bancada de senadores socialistas es muy atingente porque permitiría que el subsidio de $40.000 que enviará el Gobierno al Congreso, sea aumentado al doble para las tres Regiones declaradas Zonas de Catástrofe: O´Higgins, El Maule y Bío-Bío. Estas tres regiones representan en conjunto un 23% de la población nacional y el mayor impacto de esta medida en el gasto fiscal sería equivalente a unos 75 millones de dólares.
Se trata de una medida justa porque el país solidariza con las familias más afectadas por el terremoto. Además está bien focalizada, porque el subsidio se entregaría en forma directa a las familias de las regiones más afectadas y que tengan ingresos familiares menores a los $450.000. No cabe la menor duda que una medida de este tipo hubiese sido rápidamente considerada por la anterior administración de Michelle Bachelet.