Se equivoca el Presidente de la República al levantar como amenaza una eventual estatización de la Educación.
Avanzan en el Senado dos iniciativas parlamentarias relativas al fin del lucro en la Educación. Ambas coinciden con las demandas estudiantiles de los últimos meses. Ante ello la derecha muestra los dientes: ha iniciado una campaña del terror que falsea los hechos, indicando que más de dos millones de estudiantes quedarían sin matrícula. Eso es mentir descaradamente.
Desde la Concertación impulsamos estos proyectos, manteniendo una educación pública y una educación particular subvencionada, así como una exclusivamente particular. Se mantiene, en consecuencia, el sistema mixto, sin que exista en el debate actual ninguna propuesta que lo termine.
Se equivoca el Presidente de la República al levantar como amenaza una eventual estatización de la Educación. A su vez el ministro Bulnes levanta la falacia acerca de que más de un millón de estudiantes quedarían sin liceo o colegio, en suma, la derecha vuelve a sus prácticas tradicionales: una vez que se tocan odiosos privilegios recurre a la campaña del terror.
Los cambios educacionales pedidos por los movimientos de los estudiantes sólo amenaza el enriquecimiento ilícito, de los que obligan a pagar elevados costos en matrículas a las familias y a los jóvenes; la verdadera amenaza es que altas rentabilidades disfrazadas con costos especulativos, lleguen a su término.
En los últimos días el Senado se ha visto una derecha desesperada ante el fin del Lucro. Las posiciones se sinceran, la derecha vuelve a lo suyo, a su trinchera natural: defender el lucro, no importa que sea fraudulento, espurio e ilegal.
No nos dejemos atemorizar ante la campaña del terror. Esperemos que con la fuerza de la ciudadanía llegue el momento del cambio.