La senadora y presidenta del PS, Isabel Allende, sostuvo esta mañana que el país está ante “la potencialidad de generar una crisis de legitimidad con severas consecuencias” si no se abordan las tensiones que hoy enfrenta nuestra sociedad.
La parlamentaria hizo esta afirmación, como invitada a exponer su visión de país durante la mesa redonda “Desarrollo inclusivo y sostenible: dimensiones económicas y sociopolíticas”, organizada por el Instituto Igualdad y la Fundación Friedrich Ebert.
El encuentro se basó en el documento del mismo nombre, elaborado por un grupo de profesionales encabezados por la ex ministra Clarisa Hardy, el ex subsecretario, Álvaro Díaz; el senador Carlos Montes y el presidente del Instituto Igualdad, Álvaro Elizalde, a petición de la Presidenta del PS, en el marco del XXX Congreso del partido que se realizó a comienzos del 2016.
Esta mañana, el texto fue debatido por académicos y dirigentes tanto de la Nueva Mayoría, como de otros sectores progresistas. Participaron Andrés Fieldbaum, vocero de la Izquierda Autónoma; Marcela Sandoval, secretaria general de Revolución Democrática; el ex ministro Álvaro García; Nicolás Grau, del Movimiento Autonomista; Fernando Carmona, representante del Instituto de Ciencias, Alejandro Lipschutz; Claudia Sanhueza académica de la UDP; el presidente de la JDC, Diego Calderón; la directora editorial del Desconcierto, Francisca Quiroga; el economista y académico de la Universidad de Chile, Guillermo Larraín; y el dirigente del Partido Radical, Guillermo Vásquez.
Asistieron también la representante en Chile de la Fundación Friedrich Ebert, Simone Reperger; los economistas, Andreas Uthoff, Hernán Frigolett y Álvaro Gallegos; los abogados constitucionalistas Fernando Atria y Flavio Quezada; el presidente de la JS, Francisco Melo; Javiera Parada de RD y el dirigente del PC, Juan Andrés Lagos, entre otros.
Al comenzar la actividad la senadora Allende enfatizó que “no es tiempo de recetas sino de oír y construir en conjunto”. La parlamentaria explicó que, a su juicio, las dos tensiones que ponen en juego la legitimidad política son “la persistente desigualdad que atraviesan todas las esferas de nuestra vida social: socioeconómica, de género y territorial.” y lo que llamó “el creciente protagonismo ciudadano y su exigencia de ser parte de las decisiones públicas, que chocan con un sistema político profundamente dañado, tanto por las malas prácticas que han sido denunciadas en los últimos dos años, como también por una lejanía de las instituciones respecto de los ciudadanos.”
Respecto al desafío económico que enfrenta el país explicó que “tenemos que ser claros: para generar crecimiento se requiere la alianza público-privada. Nosotros no vamos a desarrollar el país solo a partir de la actividad del Estado. Es crucial el rol del sector privado”. La senadora Allende aclaró en particular sobre el Estado que este no sólo debe ser subsidiario como algunos plantean “sino que ejerza liderazgo y sea un articulador global de la economía”. Pero para eso tiene que ser transformado en un Estado “moderno, eficiente y competente”.
Isabel Allende valoró el encuentro con las más amplias vertientes de la centro izquierda y el socialismo y relevó la importancia de asumir los desafíos que hay sobre prioridades como el desempleo juvenil, un transporte público muy superior para las ciudades y un sistema de protección social que incluya a los adultos mayores y una política que incorpore a los inmigrantes, entre otros temas.
Más allá de las diferentes opiniones frente al documento elaborado por el PS, los participantes valoraron en forma unánime el espacio de debate al que convocó el Instituto Igualdad y la Fundación Friedrich Ebert.
Finalmente, la senadora Allende invitó a todos los participantes a seguir estos encuentros de forma abierta y sin descalificaciones, como lo fue en esta ocasión.
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