En este primer año de gobierno de la derecha, la Concertación y más ampliamente la oposición ha tenido que buscar una manera de definirse, un talante, un modo de construir decisiones. Una tesis posible es pensar que a la Concertación le está faltando mayor diálogo y vinculo con el movimiento social. Y más extensamente que la política chilena requiere volver a subsumirse en las dinámicas sociales y culturales, para desde allí reconstruir su legitimidad.
La experiencia de Magallanes es ilustrativa en este sentido: fue un complejo social y político que condujo la movilización y que negoció una solución. No toda la responsabilidad se trasladó a los partidos o a los legisladores, sino éstos actuaron dentro de un movimiento social amplio, que fue donde se fueron tomando las decisiones de movilización y negociación.
No parece que políticamente la disyuntiva sea si se debe ejercer una oposición intransigente o si se debe tener capacidad de llegar a acuerdos, sino la oportunidad de una y otra, y, por sobre todo, que lo político y lo social se unan y se coordinen en el proceso de toma de decisiones.
Una de las características de este año ha sido un lento pero sostenido proceso de rearticulación del movimiento social. Distintas expresiones en materias laborales, indígenas, medioambientales, regionales, etc. se han venido expresando en esta última etapa. Se va constituyendo así un nuevo actor político: el movimiento social.
Incluso es posible sostener que la oposición al gobierno de Piñera es muy fuerte y que esta ya se encuentra en un 43% a un 45%, sin embargo, ello contrasta con los débiles signos de aprobación que tiene la Concertación y los actores políticos. Ello significa que hoy la oposición social es mucho más fuerte que la oposición política, o que las mayorías energías opositoras hoy están siendo canalizadas por los ciudadanos a través de movimientos sociales de diversa índole.
En este sentido, puede ser que los últimos acuerdos entre gobierno y Concertación se encuentren correctamente orientados desde el punto de vista político, pero requieren ser construidos a futuro con mayor diálogo con el mundo social, para que éste se sienta parte de las decisiones que vaya adoptando la oposición política. De lo contrario se irá ensanchando la brecha entre la ciudadanía y la política opositora.
Pareciera ser que el resultado y consecuencia del acuerdo educacional –que entre otros aspectos significó la pérdida para el PS del valioso diputado Sergio Aguiló- ha llevado a la Concertación a redefinir sus mecanismos de decisión, particularmente en lo que dice relación a las consultas e involucramiento de los actores sociales en las próximas definiciones de movilización y negociación entre oposición y gobierno.
PRESIDENTE DEL PS ANUNCIA QUE CONCERTACIÓN SE ABRIRà A LA CIUDADANÃA PARA ENFRENTAR TEMÃTICAS DE LA OPOSICIÓN
El Presidente del Partido Socialista de Chile y vocero de la Concertación de partidos por la democracia, Diputado Osvaldo Andrade, anunció una nueva fórmula que el conglomerado opositor adoptará para enfrentar las diferentes perspectivas temáticas a través de la creación de un espacio de reflexión y debate que incluirá la participación de actores polÃticos y ciudadanos. Asimismo, Andrade reafirmó la necesidad de continuar con un pacto de centro izquierda expresado en la Concertación, asumiendo, también que la ciudadanÃa está pidiendo que sean capaces de repensar la coalición.
“El espacio lo que intenta es construir un lugar permanente de trabajo e intercambio de opiniones y también de determinación de tareas y en este espacio, la idea es que participen actores del mundo polÃtico, partidos, y también actores del mundo social, organizaciones ciudadanas, de las más tradicionales hasta las más novedosas. Configurado ese espacio es el lugar desde donde vamos a establecer las condiciones para que se genere una oposición más genuinaâ€, enfatizó Andrade.
El vocero de la Concertación aclaró que la nueva instancia no está considerada como un cónclave porque ese mecanismo estaba pensado hacia el interior y lo que la Concertación buscaba era todo lo contrario: “lo que queremos es un espacio amplio y común de la oposición de forma permanente de modo tal que la discusión polÃtica del próximo año se nutra muy fuertemente de lo que se construya en ese espacio de trabajoâ€
Andrade agregó que la instancia no se habÃa pensado desde su orgánica sino desde una invitación en la que se conversarán alternativas para tomar decisiones también sobre el contenido funcional.
“Es un espacio de diálogo y propuesta y de ese punto de vista, evidentemente, lo que ahà se plantee será visto para la tarea de ser oposición. La oposición no sólo se va a expresar en el parlamento, también se expresa en la sociedad y, en consecuencia, es parte del debate tambiénâ€, explicitó el Diputado Socialista.
Sobre las distintas visiones de rumbo que debe tomar el conglomerado opositor, el Presidente del PS, señaló que no se trataba de encontrarle la razón a uno u otro sino a una reflexión común: “nosotros queremos reenfocar el trabajo de la Concertación desde nuestro rol de oposición y en ese sentido invitar a una oposición, que por cierto es más amplia que la sola Concertación, para constituir un espacio comúnâ€
Para Andrade el que existan diferencias al interior del conglomerado era parte de la naturaleza del mismo, recordando la Concertación se creó reconociendo su diversidad y asumiendo esa condición como su gran riqueza: “que hayan distintas opiniones en relación con distintos temas es parte no sólo de nuestra naturaleza sino que incluso es deseableâ€
No obstante, el lÃder opositor, aclaró que cuando los temas se refieren a los partidos a la Concertación era relevante que la totalidad de los partidos tuviera una opinión unÃvoca: “cuando se trata de otro tipo de eventos será perfectamente posible que existan diferencias pero cuando se trata de temas que involucran a la Concertación en su integridad como conglomerado, los cuatro partidos tendrán que estar de acuerdoâ€
“Lo que estamos estableciendo es un método y dentro de ese método hemos tomado decisiones de fondo, como es volcarnos en un espacio de oposición que, claramente, es más amplio dada la insuficiencia nuestra, también, evidentemente el procesar esta diferencia es parte del método que hemos construido, es un sistema para procesar nuestras diferenciasâ€
Asimismo, Andrade recordó que la Concertación se encontraba trabajando en varia temáticas y equipos como el proyecto de la coalición, que ahora incorporará la opinión de loa actores de la ciudadanÃa; un proyecto municipal, que está definiendo como enfrentar el compromiso programático de las primarias; y para impedir la privatización de las empresas sanitarias.
Finalmente, el vocero de la Concertación, anunció que junto con la creación del espacio de diálogo permanente de la oposición con organizaciones sociales, durante el mes de marzo se convocará a Diputados y Senadores junto a las mesas de los partidos de la Concertación a un encuentro para discutir las diferencias que han surgido a propósito del rol de oposición.
LA CONCERTACIÓN VIVE SU PROPIO CAMBIO CLIMATICO
La vicepresidenta de la Mujer del PS, Pilar Durán en el marco de los conflictos programáticos y la renuncia del Diputado Aguiló, señaló que la Concertación vivÃa su propio cambio climático e hizo un llamado a avanzar en propuestas amplias, coherentes y representativas.
“La Concertación vive su propio cambio climático, dónde habÃa acuerdos y consensos, hoy hay diferencias y distancias. Por ello, debemos reconocer que los desafÃos del futuro son valorar nuestras legitimas diferencias y matices, para sintonizar con las aspiraciones ciudadanas, como observamos en la reforma educacional acordadaâ€, indicó Pilar Durán.
La vicepresidenta del PS agregó que estaba en cuestión la opción del conglomerado opositor de construir mayorÃa: “la principal lección de nuestro conglomerado es que si aspiramos a gobernar nuevamente Chile, debemos avanzar en propuestas amplias, coherentes y representativas. Si no entendemos este dilema, seguimos en serios problemas para ser opción de mayorÃaâ€
Para la dirigente PS ante las paradojas y tensiones internas, era urgente fortalecer el futuro Congreso Partidario socialista a desarrollarse en mayo del 2011: “como espacio institucional para fijar una agenda programática y enfrentar las elecciones municipales y los proyectos de reformas, de manera unitaria e integradoraâ€.
Finalmente, la vicepresidenta del PS, hizo un llamado al diputado Sergio Aguiló a reconsiderar su decisión, para resolver estas controversias en el marco del congreso partidario.
Carta abierta sobre el futuro de la Concertación
Autor: Varios socialistas
Compañeras y Compañeros:
Se ha instalado entre nosotros el debate en relación al futuro de la Concertación. A juicio de quienes suscribimos esta carta, esta discusión debe ser abierta, valiente, sin vetos ni exclusiones de ningún tipo y de cara a la formación de una nueva coalición polÃtica y social. Debe ser, por sobre todo, un debate de ideas y de proyectos.
No se trata, en nuestro concepto, ni de una Concertación 2.0, ni de una Concertación ampliada, sino que debemos avanzar hacia la creación de un nuevo referente, en el marco de un proceso de profunda reflexión, que inspire, pero también renueve, los ideales que llevaron a nuestros partidos a gobernar democráticamente a Chile durante 20 años.
Asimismo, estamos convencidos de que para recuperar la confianza y el respaldo de la mayorÃa de los chilenos y chilenas debemos empezar a trabajar, en primer lugar, en la elaboración de un proyecto y un programa social que sintonice con las demandas del nuevo Chile que vivimos y que, sin duda, anhela mayores niveles de justicia social. Chile es hoy un paÃs más rico, pero no un paÃs más justo y ésa es y debe ser la gran causa que convoque y movilice a las fuerzas progresistas de centro e izquierda.
A partir de nuestro XXIX Congreso Nacional “Eugenio González Rojas†a desarrollarse durante el presente año, nuestro partido tiene la oportunidad histórica de avanzar y profundizar en el debate de ideas en la búsqueda de un nuevo pacto programático del mundo de izquierda progresista
El reencuentro entre la polÃtica y la ciudadanÃa es clave. La fuerza del mundo progresista, del arco de fuerzas de centro e izquierda de la que formamos parte, está, precisamente, en el mundo social y en sus organizaciones. En la energÃa transformadora de la ciudadanÃa y en su pujanza por más y mejores derechos y responsabilidades, y por una convivencia más solidaria. Por ello, estimamos indispensable recorrer este camino de la mano con la ciudadanÃa, convocando las voluntades de antiguos y nuevos actores sociales que comparten nuestra mirada progresista y nuestro anhelo de construir un paÃs más justo.
Marcelo DÃaz
Alfonso De Urresti
Gonzalo Martner
Paula Quintana
Arturo Barrios
Carolina Carrera
Danilo Núñez
José Jara
Danae Mlynarz
Paula González Y.
Freddy Ponce
Hernán GarcÃa
Mireya GarcÃa
Mario Silva
Danilo Herrera
Mariana Arellano O.
Edison Ortiz
César Barra
Ignacio LLedó
Marisol Sanhueza
Sebastián Depolo
Marcelo Pérez
Ginette Joignant
Ulises Pasten
Cristián UrÃzar
David H. HenrÃquez
RocÃo González
¿Es posible un dialogo fructifero y dinamizador de cambios entre la polÃtica y los movimientos sociales, si la convocatoria y la hegemonÃa discursiva parte de la polÃtica y los partidos polÃticos?, estimo que el gran dilema se presenta que se quiere escuchar a la ciudadanÃa por medio de los movimientos sociales y su dirigentes, pero no se quiere que sean parte de un «todo», cuando se esta por alcanzar el poder y gobernarlo; es decir, cuando se esta en la oposición, la ciudadanÃa y sus movimientos sociales es algo estrategico y necesario, pero cuando esta en el poder y gobernando, los movimientos sociales, sus dirigentes son un obstaculo y lo único que quieren son revindicaciones de carácter corporativo. Entonces el dilema es una contradicción no necesariamente dialéctica, al parecer la polÃtica y sus actores en el devenir de los hechos y acontecimientos pasaran a la retaguardia y no a la vanguardia.
Magallanes mostró el camino, una vez más, los actores politicos debieron subordinarse al movimiento social, la Asamblea de la CiudadanÃa magallánica. Los actores politicos no pudieron decidir (y negociar) al margen del movimiento social.